¿Qué quiere decir Vinyasa?
Vinyasa es una palabra en sánscrito que se utiliza en yoga con varios significados. Etimológicamente, nyasa quiere decir «poner», y vi «en un lugar en concreto». Veamos qué es lo que queremos decir con esto exactamente:
1. En yoga, el primer significado de Vinyasa es «unión de respiración y movimiento». El tradicional saludo al sol es un ejemplo de esto, cada movimiento va unido a una parte de la respiración: por ejemplo, inhalamos elevando los brazos hacia el cielo; exhalamos doblándonos de la cintura y llevando los brazos al suelo. Como norma general, la inhalación se corresponde con movimientos de apertura; y cerramos o flexionamos al exhalar. Cuando lo practicas, puedes sentir que casi surge de forma natural, se trata de facilitar los movimientos respiratorios: abriendo al inhalar para usar toda la capacidad de nuestros pulmones, y cerrando al exhalar para facilitar el vacíado.
2. Vinyasa son también las transiciones que se hacen entre poses mantenidas, como los movimientos que hay entre las diferentes asanas que forman las series de ashtanga. Se utilizan para mantener la concentración (en lugar de pasar de una asana a otra sin más), y también para equilibrar el efecto de una postura, neutralizar y prepararse para la siguiente. Estos movimientos requieren energía, y ayudan a producir calor interno, el fuego (agni) purificador.
3. Vinyasa krama se refiere a los pasos que uno toma hacia una dirección en particular. T.K.V. Desikachar habla sobre ello en su libro El Corazón del Yoga. Se refiere a como secuenciamos nuestra práctica para llegar a un punto determinado, partiendo del punto en el que estamos en este momento. Se puede aplicar a la manera de adaptar el yoga para diferentes personas y necesidades, y también a como utilizar la tecnología del yoga de una manera sabia e inteligente para crear una evolución, un cambio (por ejemplo, cambiar la energía en un momento en el que nos sentimos angustiados o nerviosos; o a largo plazo, aumentar nuestra concentración).
4. Por último, Vinyasa es el nombre con el que se conoce a una forma de práctica que hace énfasis en la unión de unas posturas con otras, de una manera fluída (flow). Se deriva del primer significado, la unión de respiración y movimiento. la respiración es el ritmo que marca nuestro paso por esta vida, y practicar esta forma de yoga es como bailar sobre ese ritmo.
Se utiliza la respiración Ujjay: exhalando e inhalando por las fosas nasales y cerrando el paso del aire a través de la glotis, de forma que se produce un sonido «del océano» (es como si quisieras empañar un espejo, pero con los labios cerrados). La respiración Ujjay es muy poderosa, entre otros efectos crea un estado de profunda concentración, «te lleva hacia dentro». Es importante aprender a hacerla de forma suave, sin forzar, y en lo posible produciendo el mismo sonido al inhalar y al exhalar.
A mí me gusta especialmente esta forma de yoga, fluír entre las poses concentrada en el sonido de las olas de mi respiración. Es realmente una meditación en movimiento. En mis clases intento llegar a esta fluidez, pero pienso que es muy importante aprender las asanas y la alineación correcta antes de poder ponerlas en movimiento.