El peso que nos sobra
Curioso, pero cuando decimos que el yoga sirve para adelgazar no nos referimos (sólo) a las prácticas más atléticas y sudorosas tipo Ashtanga o Bikram. Resulta que una de las fórmulas más eficaces para perder peso es aprender a relajarse. Estudios relacionan el stress mantenido y la incapacidad para relajarse profundamente con el aumento de grasa abdominal (alrededor del estómago). Y esto no sólo puede resultarnos poco estético, es que está relacionado con altos niveles de colesterol y triglicéridos, así como presión arterial alta, un cuadro que se conoce como síndrome metabólico y que puede conducir a diabetes, infartos y accidentes cerebro-vasculares.
Así que otra razón más para asomarse al mundo del yoga.
No me gustaría que este post pareciera una exaltación de la delgadez, para eso ya están TODOS los demás medios. Pienso que el yoga te facilita, por un lado, un conocimiento de tu propio cuerpo, y por otro, una capacidad para abrirse y amar (también a uno mismo) que sirven como protección frente a todos esos mensajes que nos intentan hacer creer que no somos suficientemente buenos y que tenemos que cambiar. He estado enseñando durante varios meses en un retiro especializado en ayunas y he tenido la oportunidad de comprobar los estragos que hacen todas las connotaciones y la carga que le hemos puesto al hecho, en principio simple, de comer. Por mi parte, no hubiera permitido que realizaran el ayuno muchas de las personas que acudían (sus motivaciones para ayunar tenían un trasfondo tan insano!), y eso que yo soy una convencida del poder terapeútico del ayuno.
Otra cosa que aprendí en este lugar es a pararse antes de cada comida y realizar un pequeño ritual (allí cantábamos 3 oms y después Om Namah shivaya, seguido de una pequeña oración), pero creo que es suficiente con detenerse en un pensamiento de agradecimiento por la comida que vamos a disfrutar. Además de servir para hacer apreciación de lo que tenemos, ayuda a hacer el acto de comer menos automático y compulsivo.
No puedo resistirme a transcribir la oración que decíamos antes de cada comida (o zumo, los que estaban en el ayuno). Me gusta mucho porque tiene un aire como de algo antiguo y religioso (seguramente, el agradecimiento o bendición antes de las comidas es propio de muchas tradiciones religiosas), pero que podría utilizarse para cualquier manera de entender la espiritualidad.
La traducción en español sería algo así como:
Al sol y a la luna, al cielo y a la tierra, a todos los elementos, los devas, y los espíritus de la naturalez, os damos gracias por esta comida (o zumo) que vamos a recibir…!bendiciones sobre la comida!
(tomada de la ecoaldea y comunidad espiritual findhorn (www.findhorn.org)